CHRISTINE DE PIZÁN

Christine de Pizán fue la primera mujer de el mundo del  neoclasicismo, la cual pudo ganarse la vida escribiendo. Durante toda su infancia, se vio entre libros y eruditos de corte, gracias a su padre Tomasso, ya que su madre la quería mantener alejada de todo lo que se relacionara con la escritura y quería que se dedicara a todo lo relacionado en el hogar.Ella vivía alegre y entregada a todas sus lecturas, como contaba en algunos de sus relatos.Su vida idílica se truncó con la muerte de su hijo ,la fatídica muerte por la peste de su esposo y anteriormente la muerte de su padre lo cual dejo bastantes deudas económicas. Tenía entonces 25 años cuando se quedó viuda y con dos hijos a su cargo, además de los muchos problemas económicos que ella tenía. Le ofrecieron en repetidas ocasiones nuevos matrimonios, los cuales ella rechazó, ya que ella quería seguir escribiendo, dado que después de la muerte de su hijo y marido, se centró en nada más que escribir durante la mayor parte de su tiempo libre. A partir de la elegía que escribió sobre Carlos V, empezó a ingresar altas cantidades de dinero en su economía. Lo más destacable en sus relatos es que escribió sobre Juana de Arco, cuando estaba viva. También algunos de sus relatos sorprendentemente ya que nunca se habia hecho antes, daba consejo a los hombres grandes. Algunos de sus relatos fueron extendidos por el mundo, pero al llegar estos a Inglaterra intentaron deshacerla de autora de estos por ser una mujer, lo cual provoco conflictos.La mayoría de sus obras son ensayistas ya que ella empezó a exponer su punto de vista en la mayoría de sus obras. La Ciudad de las Damas es una de sus obras más representativas y conocidas, ya que ofrece un alegato a favor de la mujer para la que reclama un lugar en el mundo y critica a su vez la misoginia en el mundo medieval.
Como esta obra me parece bastante interesante he decido coger una pequeña parte significante la cual expone la visión de Christine en cuanto a la libertad de las mujeres.

“Me preguntaba cuáles podrían ser las razones que llevan a tantos hombres, clérigos y laicos, a vituperar a las mujeres, criticándolas bien de palabra, bien en escritos y tratados. No es que sea cosa de un hombre o dos (…) sino que no hay texto que esté exento de misoginia. Al contrario, filósofos, poetas, moralistas, todos –y la lista sería demasiado larga–, parecen hablar con la misma voz (…) Si creemos a esos autores, la mujer sería una vasija que contiene el poso de todos los vicios y males” 

Al elegir esta autora me empezó a gustar bastante y a interesar su vida, por lo que busque más y me gustaría dejaros una parte en la cual se cuenta más sobre su vida y bastantes datos curiosos.